Más grandes o más pequeñas, sea como sea tu terraza tienes un sinfín de posibilidades para crear un ambiente único. Lo primero que deberías pensar es en poseer un banco, varias sillas o hamacas que sean fáciles de plegar y desplegar. Si tu miedo es que no quede distancia suficiente de paso, tenemos buenas noticias. Lo que pretendemos en una terraza es sentarnos al aire libre ¡y disfrutar! Así que deja de preocuparte y ocupa las esquinas con muebles para poder acoger a tus invitados, de esta manera tendrás más espacio para colocar una mesa en el centro. ¡Aprovecha cada uno de sus metros!
Cuelga maceteros, juega a crear ambientes o rincones con pequeñas plantas y diseña tu propio jardín en medio de la ciudad. Verás como las plantas dan vida a tus meriendas, tus cenas a la luz de las velas o simplemente, cuando vayas a tomar el sol.
¡Rodearse de naturaleza es muy beneficioso!
Las fuentes prefabricadas, además de relajar, ¡son un elemento decorativo muy práctico!
Tienen un circuito cerrado de agua y solo precisan un enchufe. Las encontrarás de todos los tamaños y formas para dar ese toque único a tu terraza.
Imagina tu terraza ideal, ¡con unos cuantos elementos puedes hacerla realidad!
Un banco de madera mullido, cojines de colores, flores, plantas trepadoras…
Busca siempre muebles con materiales que se adapten al estilo y a los materiales de tu terraza. ¡La madera antigua suele ser un must!
No olvides tener algún elemento que sirva para crear sombra, lo agradecerás los días de mucho sol. Puedes optar por una pérgola y si tu terraza es pequeña, encontrarás modelos que se abren para que entre el sol o se cubren con toldos corredores.
Como último consejo, fíjate bien el lugar en el que pones tu mesa. Una mesa ha de ser cómoda y debe estar resguardada del viento. Así evitarás que vuelen objetos o se apaguen, cada dos por tres, las velas.
Fuente: Imágenes de nuestros proyectos realizadas por EL MUEBLE
